¿No logras terminar tus historias?

El 2021, una amiga escritora me recomendó como asesor narrativo para un joven escritor que no conseguía avanzar con su proyecto de ciencia ficción. Si bien yo llevaba años enseñando escritura creativa en un colegio y desarrollando talleres para asociaciones y de manera particular, gracias a lo cual forjé grandes amistades y aprendí mucho más sobre el oficio de escribir, lo que complementé con una maestría en escritura creativa, la experiencia de asesorar directamente a un escritor en su proceso, avanzando poco a poco, abordando, desde la teoría, las necesidades de su historia, y explicándole, desde lo empírico, los mejores mecanismos para no ser apabullado por las propias ideas y la página en blanco, ha sido uno de los procesos más enriquecedores de mi oficio, pues me ha permitido potenciar el talento de un joven narrador mientras aprendía y reflexionaba, aún más, sobre el arte de escribir.

Trabajamos juntos poco más de un año, pero todo el esfuerzo dio frutos. Al iniciar con la asesoría, pude detectar los siguientes problemas en su proceso:

– Dificultad para abordar el inicio de la obra

– Falta de estructura narrativa, a pesar de conocer bien la trama

– Diálogos mal empleados

– Limitaciones narrativas autoimpuestas

– Dificultad para desarrollar a sus personajes

– Ansiedad frente a la página en blanco

– Dudas sobre la estética de la obra

Lo primero fue hablarle un poco de teoría, explicarle los conceptos más básicos, que se abordarían a lo largo de la asesoría, en los momentos en que su escritura lo requiriera.

Nos reuníamos un día por semana durante dos horas a que avanzara con su propuesta. Cuando cometía un error o se frenaba, bastaba recordarle la teoría y plantearle ejemplos basados en mi experiencia para que continuara.

Me sentía como una especie de personal trainer creativo. Era capaz de decirle qué mecanismo imaginativo utilizar para hacer que su obra avanzara. Poco a poco, empezó a escribir más, y empezó a llegar a las asesorías cada vez con más material por revisar antes de comenzar a escribir.

Con el paso de los meses, mis intervenciones se hicieron más esporádicas. Lo ayudaba a reflexionar sobre momentos específicos y lo intentaba aconsejar cuando permanecía demasiado tiempo frente a una página en blanco.

Sus planteamientos mejoraron, el uso de su vocabulario también, los diálogos dejaron de sentirse robóticos y superfluos, estableció un ritmo narrativo basado en la disrupción clásica de la novela al presentarse como algo que no es literatura…

No pasó mucho hasta que empecé a fungir un rol más similar al de un editor, pues ya casi no me necesitaba para avanzar en su propuesta. Sus dudas, eran fáciles de resolver, y si bien le daba una mano a veces, en la gran mayoría de los casos encontraba, por su cuenta, la forma de hacer que su historia siguiera fluyendo.

Aprendió a esquivar los obstáculos que nos pone nuestra propia imaginación y logró terminar su libro y cerrar un contrato editorial para una publicación.

Cuando me dijo que me llamaría para que lo acompañase en un siguiente libro, mi respuesta fue obvia: ¿ya para qué? Le expliqué que lo siguiente sería, simplemente, seguir escribiendo y publicando, aprendiendo el oficio a partir de sus propias experiencias creativas.

El brindar esa asesoría me enseñó mucho, pues pude cotejar la teoría de la escritura creativa y mi experiencia como escritor de una manera objetiva, mientras acompañaba, paso a paso, un proceso creativo que me permitió reflexionar sobre mi propio proceso.

Debido a eso, salvo por el taller que enseño en un colegio y alguna que otra invitación a eventos extraordinarios, mi know how sobre escritura creativa he decidido enfocarlo en asesorías personalizadas, un personal training a narradores que realmente necesiten ejercitar su proceso creativo.

Si estás teniendo problemas con tu proyecto narrativo, en cualquier formato (novela, cuento, guion o libreto), escríbeme al Whatsapp +51 993804477 o al correo asesornarrativo@gmail.com y veamos qué necesitas para que termines tu proyecto.

#Asesoría#Narrativa#Literatura#Escritura#Redacción

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